La respuesta es sí, puede tratarse de una condición subyacente muy riesgosa para la salud. La mayor preocupación es que se trate de un infarto cardiaco, lo cual se ve más frecuentemente en persones con factores de riesgo para ello (como por ejemplo la obesidad, la hipertensión, la diabetes, la edad avanzada, entre otros). Así mismo dolores en el pecho que pueden simular una angina pueden corresponder a enfermedades como embolias, neumonías u otras problemas cardiovasculares. Sin embargo debes tener en cuenta que enfermedades mucho más leves, como la costocondritis, los espasmos musculares e incluso el reflujo gastroesofágico pueden simular también una angina.
Así que lo mejor siempre será consultar con un médico para que te evalúe adecuadamente, y dependiendo de lo que éste encuentre, te realicen los exámenes y el tratamiento correspondientes. Es imperativo acudir a urgencias si presentas dolor en el pecho severo que se vaya hacia el cuello o el brazo, con ahogo o que te dificulte la respiración.