Es normal que nos preocupemos por el bienestar de nuestro bebé, sin embargo una restricción del crecimiento intrauterino no es culpa de la madre.
Con respecto a la alimentación lo importante es que sea una dieta balanceada, consumiendo frutas, verduras y proteína, recuerde comer por horario y no saltarse las comidas.
No se debe comer en exceso, el aumento de peso excesivo durante el embarazo trae riesgo de hipertensión gestacional, preeclampsia o diabetes gestacional.
Es muy importante que continué sus controles prenatales y controles por ginecoobstetricia.
También hay que tener en cuenta que normalmente los bebés con restricción intrauterina recuperan su peso y talla normales después del nacimiento.
Consulte a urgencias si presenta los siguientes signos de alarma: dolor de cabeza intenso, fiebre, dificultad para respirar, contracciones uterinas, ausencia de movimientos fetales, dolor abdominal intenso, sangrado o salida de liquido por vagina.