Sí, las inyecciones intramusculares por lo general se aplican en el glúteo o la parte superior del brazo, siendo los músculos ubicados en esta zona la suficientemente gruesos y densos para almacenar y distribuir el fármaco con el paso del tiempo. Existen otros músculos donde se pueden llegar a aplicar aunque no es la indicación común.
Si el área de inyección se torna roja, caliente o dolorosa deberás acudir al médico.