Cortase con una navaja, un cuchillo o cualquier objeto lo suficientemente filoso se considera un acto de automutilación o autoflagelo que por lo general no causa la muerte pero si tiene consecuencias físicas, estéticas y mentales fuertes que pueden repercutir seriamente en la vida de la persona. Sin embargo, cortes profundos si pueden llegar a ser peligrosos. En estos casos se necesita valoración psicológica inmediata para dar el manejo congnitivo-conductual adecuado.