Si es normal que la frecuencia de las micciones aumente durante el embarazo, sobre todo al inicio del embarazo y en los días que preceden el parto. En esta última etapa, la presión que ejerce el feto sobre la vejiga es la responsable del trastorno.
Además esto se debe a que:
-Durante el embarazo los riñones de la madre aumentan su tamaño.
-Dilatación de las vías urinarias, lo que permite que se retenga orina y esto presdispone a infecciones urinarias.
En caso de presentar ardor al orinar, orina de color oscuro o mal olor, si hay dolor pélvico o la zona lumbar, es recomendable realizar un examen de orina y que acudas a consulta médica presencial para su valoración.
Espero haber aclaro tu duda.