Esta entidad clínica rara vez puede complicarse de manera considerable, siendo la complicación más grave el atrapamiento del dedo en la posición de gatillo. El manejo debe ser brindado por tu médico tras valoración presencial y en fases iniciales suele en consistir en un manejo mediante inmovilización con férula y en algunos casos la inyección de corticoides con un analgésico local en la vaina del flexor. Sin embargo, es frecuente que más de dos tercios de los pacientes ameriten cirugía menor para su corrección.