Es muy relativo, todo depende de a donde vaya a llevarlo. Idealmente se ha recomendado que las dos primeras semanas se lleven a cabo en casa. Sin embargo, de no ser así se recomiendan lugares tranquilos, amplios, calmados, ante todo higiénicos y aseados, donde hayan pocas personas, donde el bebe no entre en contacto directo con muchas personas y claramente, donde no hayan enfermos pues los recien nacidos apenas estan madurando sus defensas y pueden ser más susceptibles a infecciones. Es importante evitar la exposición directa y excesiva al sol pues su piel es más labil y puede ser lesionada o quemada.