Si la dificultad respiratoria reaparece, hay enrojecimiento generalizado, le silba el pecho o presenta somnolencia excesiva o desmayos; debe acudir por urgencias sin dudarlo.
Es posible que se trate de una respuesta alérgica, en este caso es importante identificar posibles desencadenante que puede estar en el ambiente o en los alimentos y evitarlo si lo encuentran. Cosas pequeñas como cambios en el jabón de la ropa o las manos puede actuar como desencadenante (incluso en personas cercanas).
Es recomendable que mantenga su habitación aseada, bien ventilada e iluminada para reducir los ácaros. Y si los síntomas son intentos, persistentes o muy recurrentes debe acudir a control médico especializado, posiblemente con alergología.