Cuando aparece una línea roja o un área que parece una mancha de pintura roja en la parte blanca del ojo, eso significa que un vaso sanguíneo se ha roto. El “ojo rojo” también llamado hemorragia subconjuntival, generalmente ocurre espontáneamente después de estornudar, toser, esforzarse de alguna manera, traumatismo ocular o crisis hipertensiva, entre otros. La mayoría del tiempo es inofensiva y se cura por si sola alrededor de 10 días.
A pesar de que el ojo luce ensangrentado, una hemorragia subconjuntival no ocasiona modificaciones en la vista, secreciones del ojo ni dolor fuerte, podrías sentir un leve dolor al mover el ojo, sin embargo si presenta dolor intenso, disminución de la agudeza visual o sensibilidad a la luz, debes acudir al médico de inmediato para ser valorada.