La fluoxetina se debe tomar en las mañanas puesto que es un medicamento que puede producir insomnio, en cambio el lorazepam es un medicamento que puede producir somnolencia y por eso se recomienda tomarlo en las noches. En la medida que vaya tomando la fluoxetina y sea constante en el tratamiento la idea es que vaya disminuyendo la dosis del lorazepam hasta suspenderlo pues las benzodiacepinas (como el lorazepam) a largo plazo se relacionan con pérdida neuronal y pérdida de la memoria. En conclusión, le recomiendo tomar la fluoxetina en la mañana y el lorazepam en la noche.