Deberá lavarse la cara con un jabón neutro por lo menos 2 veces al día, si es posible utilizar toallas húmedas constantemente, en especial si ha sudado o vive en clima caliente.
Deberá además disminuir la ingesta de comida grasosa y aumentar la ingesta de frutas. Evitar cremas o bloqueadores grasosos, no manipularse (pasarse las manos) mucho por la cara y tener un buen aseo del pelo.
En caso de persistir con piel grasa puede utilizar polvos secos (ya sea de maquillaje o blancos para los pies), si aún así persiste deberá consultar de manera presencial con su médico de cabecera para determinar la pertinencia de una valoración por dermatología.