Usar jabones, duchas, talcos o desodorantes íntimos no indicados por el médico puede derivar en alteraciones del pH y de la flora bacteriana que pueden provocar:
-Alergias.
-Infecciones bacterianas.
-Infecciones micóticas.
-Foliculitis.
-Liquen plano.
Entre otras. Esta situación requiere valoración médica presencial que establezca el diagnóstico correcto y el manejo adecuado. Mientras tanto evita usar el producto y mantén una adecuada higiene local.