Esta sería una práctica adecuada. Las manos son un vehículo de transporte de una amplia variedad de patógenos por lo que el contacto de las mismas con los genitales podría producir una colonización anormal. Incluso más importante que esto es la higiene genital ya que cuando es deficiente fácilmente deriva en infecciones genitorunarias por lo que la higiene diaria y pos-coito es esencial para la salud sexual.