Cuando existe un caso de disquecia hay que ir con mucho cuidado en cómo lo tratamos. A un recién nacido no se le debe dar ningún tipo de laxante. Ni agudarlo. Especialmente porqué su popó no está duro.
Hay varias formas en las que puedes ayudar al niño a su evacuación, y haciendo que el intestino madure.
1 mediante masajes en forma cicular
2 colocación de compresas tibias en el abdomen, de esta manera los músculos se relajan y ocurre la evacuación.
Se le debe hacer un seguimiento constante al hacer la evolución.