Pueden haber diferentes factores que favorecen la aparición de pesadillas, la mayoría están relacionados con un mal patrón de sueño, entre ellos comidas en la noche pesadas (abundantes, rica en carbohidratos o carnes rojas), uso de pantallas antes de dormir, ingesta de bebidas estimulantes o ricas en cafeína, así como cambios en los horarios de sueño; otro factor que puede favorecer las pesadillas son las preocupaciones y la ansiedad, los cuales también evitan un adecuado descanso. Por último evita hacer ejercicio antes de dormir, ya que aumenta el flujo de sangre y las hormonas que te activan, de tal forma que no descansas bien. Si esto persiste a pesar que modifiques los factores desencadenantes debes volver a consultar.