El dolor a veces puede generar episodios de síncope, que se definen como episodios de alteración de la conciencia, que cuando recuperan la conciencia no se tiene ninguna secuela, es decir no movimientos anormales, no desorientación, no habla incoherente. Sin embargo por la descripción de la espuma por la boca, es necesario ver que no haya sido una convulsión por lo que sería necesaria una valoración por neurología por urgencias, sobre todo si el episodio se vuelve a repetir; además de la valoración del dedo por el trauma con el martillo