La principal enfermedad de transmisión sexual que puede provocar aumento de las bilirrubinas es la Hepatitis B, una infección hepática grave causada por el virus de la hepatitis B (VHB). Se transmite por contacto con la sangre u otros líquidos corporales de una persona infectada. Para algunas personas, la infección de la hepatitis B se puede tornar crónica, lo que significa que dura más de seis meses e incluso llegar a complicarse con cirrosis hepática, insuficiencia hepática o cáncer de hígado.
-Malestar como si tuviera gripe.
-Ictericia, es decir, coloración amarillenta de la piel y los ojos.
-Orina de color oscuro.
-Deposiciones pálidas.
-Dolor abdominal.
-Dolor articular.
-Pérdida de apetito
-Náuseas y vómitos
-Debilidad y fatiga
La vacunación es la manera ideal de prevención de esta enfermedad. Si se sospecha se estuvo expuesto deberá acudir al médico.