A pesar de que en un inicio tras su colocación la posición clásica de este tipo de implante anticonceptivo subcutáneo es en forma de "V", es normal que pueda moverse con el paso del tiempo sobre el mismo plano. Este movimiento del implante no compromete de ninguna manera la efectividad del método y no debe ser motivo de preocupación para la usuaria.
Si llegase a notar que los implantes se hacen más profundos, como insertándose en el músculo, están más duros y gruesos de lo normal o si llegan a presentan inflamación, calor y dolor; podría ser necesaria una valoración médica y la probable realización de pruebas como ecografía para establecer la indemnidad de las barras.