Es posible que se trate de una infección bacteriana en el oído (otitis), ya que uno de las factores de riesgo principales para adquirir este tipo de infección son los baños en piscina o playas, porque el agua queda retenida en el conducto auditivo. A demás el cloro de la piscina aumenta las probabilidades de infección.
Junto con la supuración puedes presentar síntomas como:
-Dolor de oído por lo general muy intenso, que se acentúa al presiona por ejemplo al apoyar la oreja en la almohada para dormir.
-Picor en el oido.
-Fiebre.
-Malestar general.
-Disminución de la audición.
Ante estos síntomas es necesario que acudas a tu médico para que te indique el tratamiento adecuado y si necesitas tomar o no antibióticos. Los analgésicos de venta libre pueden aliviar el dolor momentáneamente, pero debes ir a consulta para evitar que tenga consecuencias más graves como: perforación de la membrana timpánica o pérdida de la audición.
Te recomiendo como medidas para evitar una nueva infección:
- Al salir del agua secar bien las orejas con una toalla, de forma suave, pero asegurándonos que quedan limpias, un algodón puede ayudar a secar, pero en ningún caso utilizar bastoncillos de algodón ya que pueden producir el efecto contrario.
-Descartar las piscinas con exceso de cloro.
-Procurar bañarnos en piscinas con el agua lo más limpia posible.
-Evitar los baños excesivamente prolongados (más de una hora).
-Escoger las aguas menos frías, ya que las bajas temperaturas también aumentan la probabilidad de infección.