Tanto el asma como la escoliosis no representan un impedimento para bajar de peso. Tener problemas de tiroides, específicamente el hipotiroidismo, si no está controlado, sí puede dificultarle su pérdida de peso. Para lograrlo, primero debe asegurarse de que su problema de tiroides esté regulado y luego adoptar hábitos de vida saludables que le ayuden a perder peso paulatinamente y de forma segura. Lo mejor es tener una dieta balanceada y hacer ejercicio. La dieta debe incluir todos los grupos nutricionales (proteínas, grasas y carbohidratos), incluyendo proteína en todas sus comidas y realizando de 4 a 5 comidas en porciones más pequeñas y distribuir de forma inteligente los alimentos en el día. Evite consumir harinas refinadas como la harina de trigo y sustitúyala por harinas integrales. Prefiera los carbohidratos complejos como la avena, el arroz integral y prefiera consumirlos durante la mañana. Evite el consumo de carbohidratos en la tarde-noche. Tome abundante agua para asegurar un buen estado de hidratación que le permita a sus células oxidar grasa más fácilmente. Suspenda el consumo de azúcar y evite las bebidas alcohólicas. En cuanto a las grasas que incluya en sus comidas, evite los fritos y prefiera incluir grasas saludables ricas en omega 3 como el salmón, el aguacate, las almendras, etc. Bajo ningún concepto suspenda algún grupo nutricional totalmente de su dieta, esto puede traerle problemas de salud. Todo lo anterior debe acompañarlo de ejercicio físico tanto cardiovascular como de resistencia muscular. Lo ideal sería que pudiera tener una valoración por nutrición para que de acuerdo a su estado de salud y sus necesidades se le pueda diseñar un plan alimenticio adecuado.