No necesariamente todos los exámenes de sangre deben ser ayunas. Deben serlo solo los que sujetos a la comida puedan alterar los valores normales. En términos generales, y hablando de los paraclinicos que se solicitan de control, estos son la glicemia (azúcar en la sangre), colesterol y triglicéridos. Hay otros exámenes que no cambian con haber ingerido comida, tales como el hemograma o cuadro hematico, creatinina, nitrógeno ureico, entre otros.