Por lo general no es posible determinar si una diarrea es por bacterias o parásitos a simple vista. Los médicos lo que hacemos es interrogar al paciente por las características de sus deposiciones, dado que estas nos orientan al mecanismo por el cual se está dando la diarrea. Tanto las diarreas con moco, como las diarreas con sangre pueden ser de origen bacteriano o parasitario y la única forma de saber específicamente si es por el uno o por el otro, es que el parásito salga con la deposición ( puede ocurrir que salgan los gusanos con las deposiciones, lo que indicaría la presencia de parásitos) o que se realice un coproscópico donde, bajo microscopía se haga el hallazgo.
Lo que se hace es que se ha dividido en diarreas disentéricas ( aquellas que presentan salida de sangre) o síndromes de mal absorción intestinal ( donde salen con moco). En las primeras tanto bacterias como parásitos pueden estar involucrados y entre los más frecuentes están las Shigellas y las amebas, pero hay muchas otras bacterias y parásitos que pueden desencadenar el cuadro clínico. Lo mismo ocurre con las diarreas con moco. Lo que pasa es que al tener tal cantidad de variedad de agentes etiológicos, lo ideal es acudir siempre que haya moco o sangre por urgencias para hacer el estudio inmediatamente y poderte dar el medicamento oportuno.