Esto puede deberse a que está entrenando con mucha intensidad y no le está dando tiempo al cuerpo de adaptarse o tambien a la superficie donde está trotando. Si lo hace en las calles, las superficies normalmente son irregulares por lo cual el peso no se distribuye adecuadamente sobre articulaciones como las de la rodilla o el tobillo y esto produce dicho dolor. Trate de trotar en terrenos regulares y aumentar la intensidad de forma progresiva, no tan súbitamente.