La única función de la píldora del día después es prevenir un embarazo, luego de que una mujer ha tenido una relación sexual sin protección anticonceptiva. Es decir, está diseñado solo para casos de emergencia, y puede reducir la probabilidad de concebir en un 85 por ciento. El tiempo ideal para consumirla es durante los tres días siguientes a la relación; es decir, en las 72 horas posteriores. La eficacia solo se reduce si la tomas pasadas las 72 horas, no si las tomas muchas veces en un año, pero debes tomar en cuenta que esto no es aconsejable porque puede producir muchas alteraciones y efectos adversos a tu organismo por la carga hormonal que ellas tienen.