El retraso para lograr la eyaculación y el orgasmo durante la actividad sexual, a pesar de una adecuada excitación y estímulo puede relacionarse con factores físicos, consumo de medicamentos y condiciones psicológicas. Cuando esto genera malestar o disfunción a la pareja, se recomienda estudiar posibles factores relacionados y corregirlos (por ejemplo medicamentos o patologías no controladas). Es común que exista un componente psicológico asociado por lo que la asesoría con especialistas en sexología o psicología contribuye a la disminución de ansiedad o factores relacionados.
Es recomendable que mantenga un estilo de vida saludable con la realización de actividad física regular. Recuerde el uso de condón durante la relación sexual.