De tratarse de un derrame articular los síntomas que padece son totalmente normales en relación al diagnóstico, sin embargo, el tratamiento de esta patología suele ser sencillo tras valoración médica presencial, el cual suele incluir el drenaje del líquido contenido en la cavidad articular y la indicación de terapia farmacológica adicional con el seguimiento por unas semanas.