A pesar de que algunos estudios sugieren que la prolactina producida durante las relaciones sexuales podría estar involucrada esto no tiene base fisiológica que lo soporte, de hecho, se ha relacionado que quienes tienen sexo frecuentemente tienden a perder peso debido a las calorías que pueden llegar a quemarse durante el acto. Lo que sí sucede frecuentemente es la ganancia de peso al tener una pareja estable debido a los cambios psicobiológicos que esto incluye en los que la persona tiende a descuidar su apariencia física y comer en mayor cantidad.