Esto se ve porque el útero todavía no se ha contrado y los músculos abdominales tampoco han regresado aún a su lugar. Hay mamás que tardan entre 9 meses y un año en recuperar su peso y fisonomía, otras que lo hacen antes y otras que no lo recuperan aunque pasen los años. Lo importante es tomarlo con calma y llevar una vida sana, conectándose con el propio cuerpo y con el bebé. Fueron muchos los cambios a lo largo de 9 meses, y no solo a nivel abdominal, sino en todo el cuerpo: es posible notar que las caderas están ensanchadas, los pechos también aumentaron su tamaño, que los brazos pueden verse más grandes, etc. En todo caso, si te alimentas bien y empiezas alguna actividad física, la recuperación será más consciente y sana. también si estas dando lactancia, esto también puede ayudar a bajar de peso y a recuperar el abdomen. Las hormonas que se activan en este proceso benefician la contracción del útero para que vaya recuperando su tamaño; y, para su producción, la leche materna va consumiendo la grasa acumulada en el cuerpo, quemando calorías.