La presencia de acidez abdominal y molestias en la garganta se relacionan con un cuadro de gastritis con un posible reflujo gastroesofágico. La mejor forma de controlar esto es mediante una alimentación balanceada y un control de la acidez estomacal, que se logra mediante el uso de fármacos de forma continua al menos tres a seis meses, pudiendo extenderse más tiempo en algunos pacientes.
Evite el consumo excesivo de frituras, salsas, comidas rápidas o chatarra, bebidas negras, gaseosas. Consuma vegetales preferiblemente sin la concha para disminuir las molestias abdominales, si identifica alimentos que incrementen las molestias intente evitarlos.
Es recomendable el inicio de actividad física regular y mantener una alimentación balanceada rica en frutas y verduras, evitando los ayunos prolongados y comiendo de forma moderada pudiendo aumentar las porciones diarias a 5-6 en lugar de solo 3 al día. No ingiera alimento 1-2 horas antes de dormir y eleve la cabecera de su cama (puede usar almohadas o elevar los soportes de la parte superior de la cama) para reducir las molestias durante la mañana.
Asista a control y seguimiento médico para evaluar la evolución del cuadro. No hay un alimento o píldora que elimine los síntomas por completo en un instante, esto se logra mediante el esfuerzo de su parte y seguimiento con el médico.