La pérdida de apetito puede ser un síntoma de tristeza o de preocupación, por lo que debe pensar si tiene alguna preocupación que tenga en su mente. Fuera de eso, la ausencia de hambre sin pérdida de peso, u otros signos de alarma por ejemplo fiebre sin explicación, aparición de ganglios, o sudoración nocturna, no es un signo que se considere de alarma.