Si hay mal olor es importante saber si huele como a pescado, si presentas cambios en el flujo, ardor al orinar, comezón y/o dolor pélvico. Por supuesto es importante saber qué exámenes te hiciste y el resultado preciso, todo esto con el fin de poder orientarte mejor.
El mal olor puede estar asociado a la presencia de una infección; no necesariamente de transmisión sexual y de acuerdo a los síntomas se determina la necesidad de pruebas complementarias y el tratamiento a seguir.
Estaremos atentos a que nos amplíe la información.