El orden en el que ingieras los alimentos no va a repercutir en tu salud, lo importante es el balance que haces con ellos. La recomendación de la Universidad de Harvard para la distribución del plato de comida es que la mitad esté compuesto por frutas y vegetales de diferentes colores, evitando adicionar aderezos a base de grasa; un cuarto debe contener cereales integrales como arroz, pasta, quinoa, pan integral, etc. y el otro debe estar formado por la proteína como pescado, pollo, legumbres (frijoles, lentejas, garbanzos, etc), limitando el consumo de fritos, carnes rojas y embutidos.
Recuerda consumir al menos cinco porciones al día de frutas y/o verduras, evitar bebidas azucaradas y realizar actividad física.