El tratamiento para la hipoglucemia reactiva es principalmente la alimentación, tener una dieta libre de productos procesados, refinados, consumir alimentos con índices glucémicos bajos, altos en fibra, abundante agua y especialmente realizar pequeñas ingestas de 5 a 6 veces al día. SI de manera adecuada y por un buen periodo de tiempo se lleva a cabo una alimentación saludable y no existe mejoría, ya se piensa en un tratamiento farmacológico.