Si, es posible que ocurran alteraciones del ciclo menstrual secundarias al anticonceptivo hormonal, el riesgo de embarazo es menor del 1 por ciento. Por recomendación general un retraso más allá de 3 semanas requeriría la realización de una prueba de embarazo. Si sospecha una gestación la mejor forma de descartarlo es mediante una prueba.
Recuerde el uso complementario del condón que previene enfermedades de transmisión sexual.