Realmente en medicina nada es absoluto, por lo que la posibilidad de no detectar la infección tras pasar un periodo tan largo como 6 meses es probable, pero es extremadamente poco frecuente. Ya que los exámenes actuales tienen una impresionante capacidad para dar un diagnóstico de VIH (virus de la inmunodeficiencia humana) de forma temprana. De hecho, las pruebas rápidas de cuarta generación tienen una capacidad para diagnósticar de forma confiable a una persona tan solo al pasar 15 días tras la relación sexual de riesgo.
Si usted persiste con el temor es recomendable que se realice una última prueba al pasar los 6 meses.