Las deposiciones con sangre son un signo de alarma por lo que debes consultar con tu pediatra inmediatamente o asistir a valoración por urgencias. Las causas dependen de la edad, pueden incluir infecciones intestinales bacterianas, infecciones parasitarias, entre otras causas. Es muy importante realizar una historia clínica completa y examinar a tu bebé para poder realizar un diagnóstico adecuado e iniciar tratamiento si lo requiere.