Las quemaduras generadas por el sol tardan un tiempo en sanar, aproximadamente entre 3 y 7 días ya que se afecta la primera capa de la piel. Para ayudarte a controlar los síntomas puedes además de darte un baño, aplicar compresas de agua fría (no hielo), aplicar un emoliente calmante como el aloe vera y tomar abundantes líquidos. Evita el contacto con sustancias irritantes y evita exponerte nuevamente al sol. Es muy importante que recuerdes que no debes exponerte al sol por largos periodos de tiempo y mucho menos sin protector solar, ya que corres el riesgo de presentar quemaduras como las que presentas en el momento y esto puede tener consecuencias en tu piel a futuro. Siempre aplica protector solar antes de salir y reaplicalo varias veces al día, sobre todo después de nadar o secarte con alguna toalla, también es importante el uso de sombreros o gorras para protegerte del sol. Si presentas dolor muy intenso, la quemadura es en una gran parte de tu cuerpo o no mejora con el tiempo debes acudir a valoración médica presencial.