Si, al igual que un adulto, los niños empiezan a experimentar sensaciones y emociones. Lo que debes aprender a manejar es cuál es tu respuesta frente a ese comportamiento, debes transmitirle seguridad y no enfadarte más, porque eso solo le transmite que está mal enojarse y eso no es verdad, está bien que lo haga pero debes enseñarle cuál es la manera correcta de manifestarlo.