El clonazepam y el clobazam, son benzodiacepinas fármacos ansiolíticos e hipnóticos, algunos fármacos de esta clase pueden emplearse en el manejo de crisis convulsivas en urgencias por su actividad relajante a nivel muscular, no alterando su efecto sobre el ánimo y control de síntomas psiquiátricos. clomipramina es un fármaco del grupo de antidepresivos tricíclicos, también con actividad ansiolítica por su actividad sobre receptores de serotonina. Propanolol es un betabloqueador, su empleo en la ansiedad se asocia a control de síntomas orgánicos como sudoración, temblores, entre otros.
Los medicamentos deben ser utilizados bajo prescripción y siguiento las indicaciones médicas para un adecuado tratamiento. Debe asistir a seguimiento clínico.