La coloración amarilla de la piel debe evaluarse con un cuadro hemático (como el que le practicaron) y con otra prueba (también en sangre) que mida el funcionamiento del hígado. Para esto se tienen en cuenta varios parámetros como los niveles de Bilirrubina, AST, ALT, fosfatasa alkaline, entre otros.
Por otra parte, el volumen de las plaquetas no tiene ningún impacto sobre la coloración de la piel, y en su caso, aunque se encuentra un poco por encima del nivel normal, esto no tiene ninguna relevancia clínica, ni nada de que preocuparse. Cuando se toman pruebas de sangre algunos parámetros pueden salir ligeramente elevados y esto puede variar de acuerdo a los estándares que tenga en laboratorio donde le hicieron la prueba.