Las causas de este dolor pueden ser muy variables incluyendo traumatismos, constipación, neuralgias, infecciones, cálculos ureterales, prostatitis, hemorroides, orquiepididimitis, torsión testicular, entre muchos otros. Son necesarios datos adicionales para mejor orientación como localización exacta, aparición, intensidad, síntomas asociados, irradiación y cualquier otro dato que considere relevante. De la misma manera, el diagnóstico preciso solo puede ser dado a través de una valoración en consulta presencial.