Si una persona tiene contacto con el virus de inmunodeficiencia humana desarrollará anticuerpos contra parte específicas del virus. Las pruebas identifican la presencia de estos anticuerpos en la sangre de la persona, dependiendo el tipo de anticuerpo que identifique encontramos la prueba de 3ra generación, 4ta generación (detecta una proteína adicional en comparación a la de 3ra generación) y pruebas rápidas. Los resultados siempre deben ser analizados por personal médico quienes indicaran según el caso de cada paciente la necesidad de repetir la prueba o solicitar pruebas adicionales.