El mal equilibrio de las glucemias en las primeras semanas de la concepción puede ser el origen de malformaciones congénitas. Cuanto mejor se mantengan los niveles de glucemia en las primeras semanas, menores los riesgos del bebé. Durante el transcurso del segundo y tercer trimestre los riesgos de la hiperglucemia son aumento exagerado de peso del bebé (macrosomía).
Por eso es de evital importancia el control diarios de las glicemia para llevarlo al médico tratante, las citas son más continúa por ser un embarazo de alto riesgo.