Con el paso del tiempo y a medida que se cumplen más años, suele haber una pérdida natural de células ciliadas, ello genera que los se de una pérdida paulatina de la capacidad de audición.
En general se considera que los sonidos muy agudos o la exposición constante a sonidos de alto volumen van lesionando y destruyendo células ciliadas.
No, normalmente con gritos simples no hay una pérdida auditiva.