Lastimosamente no se cura, pero existen tratamientos orientados a brindar una mejor calidad de vida a la persona que tiene la enfermedad y enlentecer el progreso de esta.
Dentro de estos tratamientos se encuentra la terapia con oxigeno, la terapia de rehabilitación pulmonar, el uso de medicamentos del grupo de los coritocoides, otros medicamentos inmunosupresores, y algunos nuevos medicamentos como el nintedanib y pirfenidona indicados para el tratamiento de la fibrosis pulmonar idiopática. El trasplante pulmonar también puede ser de utilidad en el manejo de esta enfermedad.
La fibrosis pulmonar es una enfermedad que hace parte de un grupo de enfermedades que se llaman enfermedades intersticiales del pulmón, en las que se generan cicatrices en el pulmón y esto afecta la habilidad de la persona para respirar. La fibrosis pulmonar por lo general es idiopática, es decir que se desconoce la causa que la genera; pero en algunos casos si tiene causa, y en ese escenario el tratamiento iría orientado a la corrección de la causa que genera la enfermedad.
Fumar cigarrillo, algunas infecciones virales, algunas exposiciones ambientales, el uso de ciertos medicamentos, la presencia de fibrosis en al familia y la enfermedad por reflujo gastroesofágico, son condiciones que aumentan el riesgo de padecer fibrosis.
Es recomendable dialogar con el médico tratante sobre la enfermedad y las opciones de tratamiento.