Lo que esto significa es que el mioma extraído tiene un aumento anormal en el número de células y sugiere una inflamación de la zona rectal. Es una condición inusual, pero que afortunadamente no progresa en casi ningún caso a linfoma o ulceración (condiciones más severas). Suele tratarse con supositorios de Mesalazina, sin embargo, el tratamiento en su caso particular depende del médico tratante, su examen físico completo e historia clínica.