Si las contracciones son regulares y están aumentando en intensidad puede tratarse de un trabajo de parto antes del tiempo indicado y es necesario que acudan un servicio de urgencias donde puedan evaluar el bienestar del bebé y de tu esposa y tomar las medidas necesarias. Manténganse atentos a los movimientos del bebé, y a si tu esposa expulsa alguna descarga vaginal con sangre o con líquido abundante.