Normalmente una uña encarnada u onicocriptosis se manifiesta con inflamación de los pliegues laterales ungueales (de la uña) y de los bordes de la lámina ungueal, además cursa con dolor local intenso, ocasionando a veces un cuadro infeccioso, con formación de tejido de granulación (cicatrización errónea), lo que conlleva gran molestia e incapacidad para el paciente. Puede ameritar en ocasiones tratamiento quirúrgico.