El hecho de aguantar por mucho tiempo las ganas de orinar si favorece el crecimiento bacteriano al no haber el mecanismo de barrido propio e la orina al ser expulsada así como al formarse sedimento en la orina. Otras complicaciones relacionadas con incontinencia urinaria, hidronefrosis, entre otras cosas podrían también estar de cierta manera relacionadas con esta practica. Se recomienda orinar siempre que se sienta la necesidad de hacerlo sin aguantar más de 20 minutos, en caso de presentar orina turbia o fétida acudir al médico para valoración.