Las lesiones quísticas retroperitoneales constituyen eventos de frecuencia inusual, por lo que es posible que requiera de una valor por parte de un especialista en el área como el cirujano de tejidos blandos para ayudar a clarificar el diagnóstico del mismo. Muchos de los hallazgos radiológicos en este tipo de lesiones pueden ser compartidos sin orientar a un diagnóstico definitivo y muchos pueden pasar desapercibidos hasta presentar un crecimiento significativo en ausencia de síntomas específicos al no depender directamente de un órgano. Este tipo de patologías pueden ocurrir en ausencia de antecedentes patológicos específicos.
Para un enfoque apropiado de su caso se deben valorar de forma conjunta su estado actual y los diversos análisis realizados, pareciendo aún faltar la realización de una biopsia de la lesión.
Es importante igualmente el análisis de procesos patológicos alternativos más frecuentes y que puedan requerir estrategias de manejo diversa, razón por la cual encuentra en ocasiones distintos diagnósticos en proceso de evaluación y estudio.
La idea del manejo médico es que tenga continuidad entre sí y por medio de las distintas valoraciones y estudios se logre definir un diagnóstico y tomar las decisiones apropiadas para garantizar la salud y bienestar del paciente.